CUIDADO DE ADULTOS MAYORES CON DEPENDENCIA
Categories: Cuidado Fisico
Acerca de este curso
Cuidar a una persona mayor con dependencia significa poner a su disposición los apoyos y ayudas
necesarios para responder a sus necesidades físicas y emocionales en la vida diaria, intentando mantener
su autonomía y bienestar con la mayor calidad y calidez, para que pueda continuar con su proyecto de
vida.
El cuidador es aquella persona que dedica gran parte de su tiempo y esfuerzo para conseguir que la
persona mayor con dependencia pueda desenvolverse en su vida diaria, ayudándole a adaptarse a las
limitaciones que pueda tener.
El cuidador desempeña también otras funciones importantes, como:
■ Ser informador de la situación y evolución del estado de salud de la persona en situación de
dependencia.
■ Participar, conjuntamente con la propia persona si es posible, en la toma de decisiones. Si no fuera
posible que la persona cuidada participara en esas decisiones, el cuidador velará porque se respeten
sus deseos y preferencias de acuerdo con su historia de vida.
EL CUIDADOR DEBE RESPETAR SIEMPRE LOS DERECHOS, LAS
DECISIONES Y LAS PREFERENCIAS DE LA PERSONA MAYOR
DEPENDIENTE
What Will You Learn?
- Ser cuidador implica asumir responsabilidad y supervisión sin preparación previa,
- generando inseguridad.
- El cuidador debe defender los derechos de la persona cuidada, asumir responsabilidades en
- su vida diaria, y enfrentar la sobrecarga física y emocional, planificando y preparándose
- adecuadamente. Manténgase alerta ante las señales de sobrecarga.
- El texto describe señales físicas, psíquicas/emocionales y sociales del estrés, incluyendo
- cansancio, tristeza, ruptura de relaciones y soledad. También menciona alteraciones del
- sueño y disminución de la autoestima.
- El documento ofrece consejos para mantener la salud física, emocional y social, como
- acudir al médico regularmente, respetar horarios de comida, mantener una actitud optimista
- y buscar apoyo social. También sugiere priorizar actividades, aprender a relajarse y
- mantener contacto con familiares y amigos.
Course Content
TEMA 1
LAS RELACIONES Y LA CONVIVENCIA CON LA PERSONA MAYOR EN EL DOMICILIO
Ser cuidador implica asumir responsabilidad y supervisión sin preparación previa,
generando inseguridad.
El cuidador debe defender los derechos de la persona cuidada, asumir responsabilidades en
su vida diaria, y enfrentar la sobrecarga física y emocional, planificando y preparándose
adecuadamente. Manténgase alerta ante las señales de sobrecarga.
El texto describe señales físicas, psíquicas/emocionales y sociales del estrés, incluyendo
cansancio, tristeza, ruptura de relaciones y soledad. También menciona alteraciones del
sueño y disminución de la autoestima.
El documento ofrece consejos para mantener la salud física, emocional y social, como
acudir al médico regularmente, respetar horarios de comida, mantener una actitud optimista
y buscar apoyo social. También sugiere priorizar actividades, aprender a relajarse y
mantener contacto con familiares y amigos.
TEMA 2
HABILIDADES PARA LA COMUNICACIÓN
Una buena comunicación es la base para el mantenimiento de unas buenas relaciones y de la
convivencia en el domicilio. Potenciar la comunicación es un aspecto fundamental para garantizar
un buen cuidado.
Una buena comunicación con la persona mayor con dependencia promueve su autonomía, evita
el aislamiento y contribuye a que se sienta bien y esté más tranquila.
Usted también se sentirá mejor comunicándose con ella y podrá mostrarle afecto.
Consejos generales
■ Siéntese cómodamente al lado o en frente de la persona mayor, manteniendo siempre contacto
visual con ella.
■ Elija momentos relajados y oportunos para conversar. Si la persona mayor o usted están
enfadadas o desbordadas, evalúe si debe posponer la conversación y retomarla en un momento
de mayor tranquilidad.
■ Observar cómo se expresa, los gestos que hace o la actitud que tiene, le ayudarán a conocer
cuáles son sus emociones y necesidades reales.
■ Muestre a la persona una escucha atenta: afirme con la cabeza, repita frases con mensajes
importantes para ella, pregúntele sobre temas compartidos, etc.
■ Muestre comprensión y transmítale seguridad.
■ Adáptese a los problemas sensoriales que pueda tener la persona mayor, asegúrese de que
lleva puestas las gafas o el audífono si los usa.
■ Apóyese en imágenes, fotos, dibujos, etc., para sortear las dificultades de comprensión del
Lenguaje verbal
■ Emplee frases cortas y sencillas. Hable claro y despacio.
■ No le haga varias preguntas seguidas. Dele tiempo para que pueda pensar y responder.
■ Favorezca la participación activa de la persona que cuida. Anímele a participar en las
conversaciones y a dar sus opiniones.
■ Busque para iniciar la conversación temas que le suelen interesar: acontecimientos de su vida,
personas y momentos significativos, etc.
■ Facilite la expresión de emociones y sentimientos de la persona mayor, aunque sean negativos,
no les reste valor.
■ Nombre siempre a la persona o las cosas a las que se refiere, evite las interpretaciones.
■ Utilice mensajes positivos: “me parece muy buena idea” en lugar de “no lo hagas así”. Utilice el
humor.
■ Evite señalar los errores cuando la persona se equivoca de palabra o no finaliza las frases o no
recuerda lo que quería decir. Propóngale la palabra correcta sin señalar el error.
■ No use frases como “no te acuerdas” con personas con problemas de memoria, puede
generarles ansiedad y malestar.
■ Hable a la persona mayor como lo hace con cualquier adulto. Aunque tenga problemas de
comprensión, nunca le trate como a un niño.
■ Pregúntele si comprende la conversación y en caso negativo escoja palabras más sencillas
quitando importancia a las dificultades.
Lenguaje no verbal
■ Tenga en cuenta que su expresión facial, la sonrisa, la mirada, los gestos o la postura forman
parte del lenguaje.
■ Acérquese y mantenga algún contacto físico con la persona mayor, cójale las manos, acaríciele,
etc.
■ Mantenga una expresión y una postura relajadas que transmitan cercanía y confianza.
■ Utilice un tono de voz suave, controlado y tranquilo, evitando mostrar enfado o nerviosismo
Manejo de la información
Las personas mayores tienen derecho a estar informadas de todo lo que les concierne, incluido el
diagnóstico, pronóstico y posibles tratamientos de las enfermedades que puedan padecer.
Debemos motivarle para que tome sus propias decisiones, evitando la sobreprotección.
En procesos crónicos y enfermedades de larga evolución o terminales es importante establecer
una información efectiva y compartida entre la persona mayor, su cuidador principal y/o sus
familiares y los profesionales. Nos facilitará:
■ El respeto a la autonomía de la persona mayor.
■ Tener expectativas ajustadas en relación a los procesos de atención.
■ Planificar los cuidados y la toma de decisiones anticipadas (testamento vital o voluntades
anticipadas), al final de la vida.
■ Prevenir situaciones difíciles o de conflicto, cuando la comunicación ya no sea posible por
factores de fragilidad o evolución de la enfermedad.
Cuando la comunicación no es posible
Existen circunstancias clínicas que pueden impedir establecer una comunicación coherente con la
persona mayor y que merman su autonomía, impidiéndole tomar decisiones.
Tener que tomar decisiones, sustituyendo a la persona mayor, implica una mayor presión y
responsabilidad en el cuidador.
Le puede ayudar
■ Comprobar si existen instrucciones previas, testamento vital o voluntades anticipadas,
registradas o verbalizadas en algún momento por la persona mayor.
■ Recordar la historia de vida y valores de la persona mayor e intentar deducir qué hubiera
decidido.
■ Rescatar alguna historia de enfermedad en su entorno y cómo fue la vivencia de la persona
mayor al respecto, puede guiarle en la toma de la decisión.
La toma de decisiones en el proceso de enfermedad o al final de la vida, puede convertirse en
fuente de conflictos entre familiares con diferentes criterios, poniendo en riesgo la unidad familiar
y la continuidad de los cuidados.
Le puede ayudar
■ La comunicación familiar efectiva reduce el conflicto y la fuerza de los roles, a la vez que
promueve la cohesión y el apoyo mutuo.
■ La actitud empática y la creación de espacios para la escucha facilita la toma de decisiones
compartidas.
■ El consenso familiar es primordial para alcanzar un clima de bienestar y disminución del
sufrimiento.
■ Ante la falta de consenso puede apoyarse en los profesionales para que medien en el conflicto.
TEMA 4
PROMOVER LA AUTONOMÍA
Para cuidar bien es imprescindible partir del respeto a la dignidad y autonomía de las personas
mayores, considerar sus decisiones y su intimidad y reconocerles sus derechos.
La gran mayoría de las personas mayores, aunque tengan limitaciones físicas o sensoriales o
necesiten de la ayuda de otros para su cuidado, siguen siendo capaces de tomar decisiones sobre
todo en aquello que afecta a sus vidas, son autónomas moralmente.
Para respetar la autonomía
■ No confunda la falta de capacidad física o funcional con la falta de autonomía. La pérdida de
capacidades en la persona mayor con dependencia no significa que no pueda desear, escoger o
decidir en su vida diaria.
■ Infórmele de las cuestiones a tratar, sin manipulaciones, para que pueda decidir.
■ Facilítele la comprensión de la información, adaptándose a las dificultades que pueda tener para
entenderla.
■ Escúchele y muéstrese dispuesto a aceptar sus decisiones, aunque no le gusten, sin renunciar a
las necesidades y deseos que usted tiene como cuidador. Busque el consenso y plantee
alternativas.
Cómo promocionar la autonomía
Muchas personas mayores en situación de dependencia, siguen siendo capaces de desarrollar
distintas actividades y tareas de la vida diaria. Las necesidades de apoyo serán diferentes en
función de cómo se encuentren afectadas sus capacidades físicas, sensoriales o mentales.
Cuidar a una persona en situación de dependencia implica ofrecer la ayuda necesaria para que en
lo posible la persona pueda seguir haciendo distintas actividades, favoreciendo la máxima
autonomía posible.
LA PRINCIPAL FUNCIÓN COMO CUIDADORES DEBE SER FACILITAR AYUDA… NO SUSTITUIR A LA
PERSONA EN SITUACIÓN DE DEPENDENCIA
Consejos generales
■ Preste atención a las capacidades que conserva la persona para seguir potenciándolas.
■ Piense qué actividades de la vida cotidiana pueden resultar de mayor interés para la persona y
fomente su colaboración en el desarrollo de éstas: cocinar, comprar, ordenar armarios, etc.
■ Implique a la persona mostrando interés por sus gustos y experiencia: ¿Cómo cocinabas tú las
lentejas? ¿Puedes ir pelando las patatas? ¿ponemos los cubiertos en la mesa? ¿quieres que
salgamos a comprar?
■ Facilite su participación. Anímele a participar en la toma de decisiones diarias teniendo en
cuenta sus gustos: ¿Qué pantalón prefieres ponerte hoy? ¿Te gustaría ver la televisión un rato o
prefieres leer?
■ Plantee las tareas de un modo sencillo y guíelas con órdenes que la persona pueda entender.
■ Felicite y anime a la persona cuando alcance pequeños logros.
■ Procure crear un ambiente seguro y sin barreras que favorezca la libertad para desarrollar las
actividades.
■ Adapte las prendas de ropa facilitando que se pueda vestir.
■ Mantenga ordenados y a la vista los productos para la higiene. Le permitirá acceder a ellos y
participar en el aseo.
■ Mantenga rutinas y hábitos: horarios en la alimentación, aseos, descanso, salidas al exterior, etc.
■ Apóyese en los materiales, los productos de apoyo y nuevas tecnologías que permitan favorecer
la autonomía.
Aunque estas recomendaciones son sencillas, en muchas ocasiones no encontrará ni el tiempo ni
las fuerzas necesarias para llevarlas a cabo. Por ello es importante que recuerde los beneficios que
pueden obtener tanto la persona mayor como usted.
FOMENTAR LA AUTONOMÍA PERMITE QUE LA PERSONA PUEDA SENTIRSE ÚTIL Y VÁLIDA,
MEJORANDO SU BIENESTAR
TEMA 5
ACTIVIDAD Y EJERCICIO FÍSICO
Las personas necesitamos hacer cosas y somos conscientes de nuestro potencial para hacerlas,
necesitamos estar ocupadas.
En numerosas ocasiones, guiados por la buena intención, impedimos que las personas mayores,
aquejadas de alguna enfermedad, realicen determinadas actividades porque pensamos que son
incapaces, privándoles de la posibilidad de realizarlas.
Los cuidadores de personas en situación de dependencia deben fomentar la autonomía y la toma
de decisiones de la persona mayor a la que cuidan, permitiendo y facilitando que se impliquen en
las actividades con la que se sientan más identificados, asegurándose de que no corran riesgos
innecesarios.
Consejos generales
■ Estimule a la persona mayor para que esté activa, no la “aparque” en un sillón.
■ Tenga en cuenta los intereses de la persona a la que cuida: ¿qué le gusta hacer? ¿Qué ha hecho
cuando era más joven? ¿haciendo qué cosas se siente más a gusto?
■ Asegúrese de que la actividad que proponga tenga algún sentido y sea significativa para la
persona mayor, pues de lo contrario dejará de hacerla.
■ Solicite su ayuda para alguna de las actividades que tenga que realizar usted, les produce
sensación de utilidad.
■ No meta prisa a la persona mayor, el envejecimiento supone enlentecimiento.
■ Intente que las actividades las haga todos los días, así se generan hábitos de vida activa.
■ Evalúe la capacidad de desempeño de la persona a la que cuida, pues la actividad tiene que ir en
consonancia con la habilidad y resistencia del mayor.
■ Sea realista. Algunas personas mayores, cuando realizan nuevamente actividades que antes
hacían con éxito y que han abandonado durante mucho tiempo, valoran su desempeño como
horrible y experimentan frustración y sentimientos de derrota. Valore reemplazar estas
actividades por otras parecidas más fáciles o ayudarles en algunos pasos de la actividad.
■ Tenga en cuenta el ambiente donde se va a llevar a cabo la actividad, tanto el entorno físico
(luz, temperatura, espacio, muebles, utensilios, etc.), como el entorno social (personas que estén
presentes o ausentes) mientras la realiza.
■ Valore si puede modificar el ambiente para facilitar la actividad.
■ Anime a la persona mayor a que emprenda una actividad, incluso ayúdela en los momentos en
los que se atasque. El objetivo es que se sienta implicada y desee continuar haciéndola. A medida
que la repita le saldrá mejor.
■ No trate a la persona mayor como a un niño, no le proponga actividades infantiles
Ejercicio físico
La actividad física y el ejercicio físico son componentes muy valiosos en el estilo de vida saludable
de todas las personas.
Actividad física
Cualquier movimiento voluntario que consume calorías.
Ejercicio físico
Actividad física que sigue un formato planeado, realizado con movimientos repetitivos, con el
objetivo de mejorar o mantener una o más áreas específicas con salud física.
Sobre el ejercicio físico debe saber…
Que genera múltiples beneficios fisiológicos para las personas mayores.
■Las personas mayores pueden mejorar también psicológicamente si hacen ejercicio de forma
regular.
■ El ejercicio físico disminuye los síntomas depresivos, aumenta la autoestima, aumenta la
sensación de bienestar, disminuye el estrés y la tensión y favorece las oportunidades de
socialización.
■Los beneficios que se derivan de participar en ocupaciones específicas y los resultados que se
obtengan serán distintos según la actividad.
■El conocimiento de los diferentes tipos de ejercicios y los beneficios asociados a ellos, así como
las precauciones que hay que tener en cuenta según las enfermedades que tenga la persona
mayor dependiente, son fundamentales para realizar los ejercicios con seguridad.
Valoraciones y reseñas de los estudiantes
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